Unos me odiarán por mi pasado; otros por mi presente.
Así y todo, creo que leer esto puede ser útil.
En un principio pensamos lo que más nos gusta. Luego puede haber dos opciones: que pase a gustarnos otra cosa o que pasemos a pensar más.
Vale la pena atreverse a esos pasos.
Hoy hago un repaso de lo que viví cuando quise cambiar el mundo.
Como fui de los que no murieron en el intento, lo cuento junto a la parte de la historia argentina que vi de cerca.
Con el tiempo descubrí que mis enemigos no eran los que querían otros cambios, sino los que no querían nada.
Tal vez esto le sirva a quien se sienta llamado a lo mismo, y en vez de odiar a los distintos se pregunte qué tienen o no de distintos. |